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Besozzi cuestionó el vínculo entre Fiscalía y Poder Ejecutivo, y afirma estar enfocado en recuperar el contacto directo con la gente

En una extensa declaración pública emitida durante su recorrido por el departamento, el candidato a la reelección de la Intendencia de Soriano por la Lista 903 del Partido Nacional, Guillermo Besozzi—actualmente en carrera electoral luego de estar ausente de la campaña durante más de 50 días debido a una medida cautelar judicial— hizo fuertes apreciaciones sobre la relación entre el sistema judicial y el poder político, defendió la necesidad de fortalecer la separación de poderes en la República y reflexionó sobre las dificultades que le ha supuesto su situación legal en pleno proceso electoral.

Uno de los ejes más firmes de sus declaraciones giró en torno al funcionamiento actual del sistema judicial y, en particular, a lo que considera una relación inconveniente entre la Fiscalía y el Poder Ejecutivo. El candidato afirmó no tener inconvenientes con el Poder Judicial como tal, pero expresó preocupación sobre el funcionamiento de la Fiscalía:

“Yo sigo creyendo en el Poder Judicial, pero no en este sistema donde la Fiscalía depende directamente del poder político. No importa de qué partido sea el gobierno; en un país democrático como el nuestro, los poderes deben estar bien separados”.

Agregó que el presidente de la República ha convocado recientemente una comisión —que será presidida por el exfiscal de Corte Jorge Díaz— para analizar posibles modificaciones al Código del Proceso Penal, una iniciativa que consideró pertinente para el futuro del sistema:

“No lo digo por mí, lo digo por mucha gente. No tengo problema en decirlo donde sea. Es un tema que trasciende los partidos políticos”.

Imparcialidad de los fiscales y riesgo de judicializar la política

El candidato también cuestionó la imparcialidad de algunas figuras del Ministerio Público, especialmente cuando sus opiniones políticas se manifiestan públicamente:

“No puede ser que me acuse una fiscal que tiene sus redes sociales repletas de publicaciones a favor del Frente Amplio y en contra del Partido Nacional. Tampoco sería correcto lo contrario. En un país republicano, eso no puede pasar”.

Sobre este punto, hizo referencia directa a recientes palabras del presidente Lacalle Pou, quien en su visita a Soriano habría advertido sobre “el riesgo de judicializar la política”. El candidato coincidió con esa preocupación:

“Si los poderes empiezan a mezclarse, perdemos todos. La justicia no puede estar influenciada por intereses políticos”.

Una campaña desigual, pero con fuerzas renovadas

Refiriéndose a su situación personal, explicó que la medida cautelar que lo mantuvo alejado de la campaña le generó una desventaja notoria respecto al resto de los candidatos:

“Estoy tratando de meter en una botella de un litro dos litros de agua. Lo que no hice en 53 días, lo estoy haciendo ahora en tres o cuatro. No es fácil, vengo atrasado, pero estoy intentando alcanzar”.

El candidato valoró el esfuerzo de su equipo y agradeció el compromiso de todas las listas que lo respaldan:

“Si llego a ganar esta elección, gran parte será por el trabajo formidable que hicieron mis compañeros en mi ausencia. Se movieron mucho, muchísimo”.

Reconoció también que esta será, a su entender, la elección más reñida que ha vivido el departamento:

“No tenga dudas. Es una elección muy pareja. Pero estoy en la cancha y lo que pasó ya no lo miro. Miro para adelante”.

Críticas al manejo judicial de su caso

El candidato afirmó que, desde que se le impusieron las nuevas medidas cautelares, no ha sido formalmente interrogado por la justicia:

“Hace 53 días que estoy bajo medidas cautelares y ni una sola pregunta me han hecho. Ni cuando me llevó la Policía, ni después. Eso no debería pasar en un país democrático como el nuestro. Estoy convencido de que este proceso es un manejo muy perverso”.

Ante la posibilidad de una eventual condena que lo inhabilite, fue enfático:

“Ni se me pasa por la cabeza. Yo estoy convencido de que voy a asumir el 8 de julio. Y si no fuera ese día, será más adelante. Pero yo estoy tranquilo”.

Un llamado al respeto en las redes sociales y en la política

El candidato también se refirió al clima hostil que, según él, se ha visto reflejado en redes sociales, muchas veces con agravios personales o desinformación:

“Si alguien se siente mejor insultando desde el anonimato, que lo haga. Me la banco. Pero eso no aporta nada a una elección, a una fiesta democrática. Si alguien tiene algo que decir, que lo denuncie donde corresponde”.

Finalizó reafirmando su convicción de mantener siempre un tono de respeto, incluso ante adversarios políticos:

“Nunca van a escucharme hablar mal de nadie. Yo creo que todos los candidatos tienen las mejores intenciones. Lamento que no todos piensen igual. A veces se quiere juntar votos pisando al otro, incluso en momentos difíciles. Yo no comparto ese camino”.

En el cierre de sus declaraciones, reiteró su compromiso con una campaña basada en propuestas y diálogo:

“Esta elección debe ser una fiesta de la democracia. Con propuestas claras, con debate sano, con respeto. Eso es lo que enriquece un país como el nuestro”.

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