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Ventajas de la Reforma jubilatoria y posibles consecuencias ante triunfo del SI

La reforma jubilatoria en Uruguay ha sido un tema de intenso debate en los últimos años, especialmente tras la aprobación de la Ley de Reforma del Sistema de Jubilaciones y Pensiones en 2023.

Esta ley busca garantizar la sostenibilidad del sistema previsional, enfrentando desafíos demográficos como el envejecimiento de la población, la disminución de la tasa de natalidad y el aumento de la esperanza de vida. En el marco de este contexto, surgen varios beneficios derivados de la reforma, así como posibles consecuencias en caso de que el plebiscito propuesto en contra de la misma sea aprobado.

Una de las principales ventajas de la reforma es que pretende asegurar la viabilidad del sistema previsional a largo plazo. Con un modelo anterior en el que cada vez menos trabajadores financiaban las jubilaciones de una población creciente de jubilados, las cuentas del sistema se volvían insostenibles. La reforma, mediante el aumento gradual de la edad de retiro y ajustes en las aportaciones, busca corregir este desequilibrio.

El próximo 27 de octubre de 2024, en Uruguay se votará un plebiscito sobre la reforma jubilatoria implementada en 2023. El resultado del plebiscito, que plantea la posibilidad de derogar ciertos puntos clave de la reforma, puede traer una serie de consecuencias importantes para el país. Si el «Sí» triunfa en el plebiscito, es decir, si se deroga la ley, las posibles consecuencias serían las siguientes:

1. Vuelta a un Sistema Menos Sostenible

Uno de los principales argumentos a favor de la reforma jubilatoria es que busca asegurar la sostenibilidad del sistema previsional a largo plazo, en un contexto de envejecimiento de la población y disminución de la base contributiva. Si el «Sí» gana, se revertirían medidas como el aumento gradual de la edad de jubilación, lo que podría llevar nuevamente a un sistema menos viable financieramente, en el que un número cada vez menor de trabajadores activos tenga que sostener a una población creciente de jubilados. Esto generaría presiones fiscales adicionales para el Estado.

2. Mayor Déficit Fiscal

La anulación de la reforma podría derivar en un aumento del gasto público para mantener el sistema jubilatorio tal como estaba antes de los cambios. Esto podría incrementar el déficit fiscal, lo que a su vez podría llevar al gobierno a tomar medidas como aumentar los impuestos, reducir el gasto en otros sectores críticos como educación y salud, o endeudarse más, generando inestabilidad económica.

3. Congelamiento de la Modernización del Sistema

La reforma buscaba adaptarse a las nuevas realidades demográficas y laborales del país, como la mayor longevidad y la necesidad de aumentar la formalización laboral. Si se deroga, se corre el riesgo de mantener un sistema desactualizado que no responde a las necesidades actuales ni a las tendencias futuras del mercado laboral, dejando al sistema previsional en desventaja frente a los cambios sociales.

4. Inestabilidad Jurídica

Un resultado favorable al «Sí» generaría un retroceso en las normativas recientemente implementadas, lo que podría traer incertidumbre tanto para los actuales trabajadores como para aquellos que ya están jubilados. Las reglas de juego volverían a cambiar, y muchos podrían verse en una situación de incertidumbre sobre sus derechos futuros, afectando la planificación personal y económica de miles de uruguayos.

5. Aumento de la Desigualdad en el Sistema Previsional

Una de las metas de la reforma era reducir desigualdades entre diferentes sectores laborales en cuanto a las condiciones de jubilación. Sin la reforma, algunas de estas inequidades podrían persistir o incluso agravarse, favoreciendo a ciertos sectores sobre otros y generando mayores disparidades en las condiciones de retiro.

6. Impacto en la Confianza de Inversores y el Mercado

La derogación de una reforma de gran envergadura, como la jubilatoria, podría generar señales de inestabilidad política y económica tanto a nivel local como internacional. Los inversores suelen valorar la estabilidad normativa y los cambios abruptos pueden afectar la percepción de Uruguay como un país seguro para la inversión. Además, un mayor déficit fiscal o endeudamiento podría deteriorar las calificaciones crediticias del país.

7. Freno a la Promoción de Ahorro Previsional

La reforma también fomentaba la creación de mecanismos complementarios para el ahorro previsional, como los fondos privados de pensiones. Con la derogación, el incentivo para que los trabajadores y las empresas adopten medidas de ahorro adicional podría reducirse, lo que afectaría los ingresos de las personas jubiladas en el futuro y dejaría menos espacio para alternativas privadas que puedan complementar la pensión pública.

8. Debilitamiento de la Credibilidad en las Reformas

Si el plebiscito triunfa y la ley es derogada, se podría generar un precedente que obstaculice futuras reformas estructurales necesarias para el país, ya que quedaría instalada la percepción de que reformas complejas pueden ser fácilmente revertidas. Esto podría dificultar la implementación de otras políticas públicas necesarias en temas como salud, educación o seguridad social.

Conclusión

El triunfo del «Sí» en el plebiscito del 27 de octubre podría tener importantes implicaciones para la sostenibilidad del sistema jubilatorio en Uruguay y para la economía en general. Aunque las motivaciones detrás de la oposición a la reforma pueden basarse en preocupaciones legítimas sobre la equidad y la justicia social, las consecuencias fiscales, económicas y de confianza institucional deben ser consideradas seriamente. En última instancia, el resultado de la votación definirá no solo el futuro del sistema jubilatorio, sino también la capacidad del Estado uruguayo para adaptarse a los desafíos demográficos y económicos de las próximas décadas.

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